Estrés y ansiedad

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El estrés y la ansiedad afectan nuestros dientes.

Para nadie es un secreto que la ansiedad y el estrés son unas enfermedades silentes que pueden acabar con la salud de cualquier persona; lo que pocos saben es que los dientes también pueden resultar afectados.

Las patologías bucales como la inflamación de la articulación temporomandibular, el bruxismo y la enfermedad periodontal pueden ser síntomas de sufrir de ansiedad. Sería ideal saber cómo el estrés se manifiesta en la cavidad bucal, cuáles son
los síntomas y qué hay que hacer para evitarlo y darle el tratamiento más adecuado.

 

Relación entre el dolor de dientes y el estrés.

Desde todo punto de vista el estrés es negativo para el organismo. Una forma para que se manifieste esatensión física o emocional es a través de dolencias en el cuerpo y también en los dientes. Las personas que pasan por momentos de mucho estrés sienten que tanto las encías, como las mandíbulas y los dientes padecen ciertas dolencias. Entonces con frecuencia el dolor en los dientes está acompañado de momentos de mucha tensión y la situación podría empeorar si no se toman acciones.

Por lo general, las personas que sufren de estrés, sin darse cuenta, rechinan los dientes o aprietan fuertemente la mandíbula y eso les genera cierto dolor y con el tiempo, los dientes suelen desgastarse.

 

Forma en que el estrés afecta la salud bucodental.

Las personas saludables no rozan los dientes superiores con los inferiores sino que los mantienen ligeramente separados. Pero cuando se vive una situación tensa, se tiende a apretar más los dientes y a generar fricción y hasta cierto desgaste. También hay más sensibilidad en los dientes y es más probable que se formen caries.

Es necesario estar pendientes de los dientes porque el estrés puede actuar de diferentes maneras. A veces no duele mucho, por lo que se recomienda ir regularmente al odontólogo para que nos comente si nota algo fuera de lo común.

Algunas condiciones bucales están directamente relacionadas con el estrés y la ansiedad. Por ejemplo, el bruxismo, la gingivitis, las aftas bucales, caries e incluso problemas de articulación.

· El bruxismo
Es una de las consecuencias más comunes del estrés. Y es que casi de forma de automática se aprietan los dientes en cualquier situación que genere cierta tensión física o emocional. El bruxismo puede ser ignorado cuando sucede de noche y puede provocar dolor en los dientes, desgaste del esmalte y fuerte dolor mandibular.

 · La gingivitis
También puede causarse a raíz del estrés o la ansiedad. Con el pasar de los años, a las personas que se les inflaman las encías por estrés pueden tener inflamaciones crónicas y es posible que se destruya el hueso y que afecten las estructuras del diente.
Las encías estarán inflamadas, enrojecidas y la dentina quedará descubierta y las personas tendrán más sensibilidad en las encías.

· Aftas bucales
Cuando las personas viven situaciones estresantes durante mucho tiempo, tanto la hormona del estrés como el nivel de cortisol aumentan más de lo normal.

· Problemas para abrir y cerrar la boca
Tanto la ansiedad como el estrés pueden llegar a tal punto crítico que las personas pueden terminar muy afectadas.Y eso podría causar mucho dolor en la sien, en la cervical, seguir con el desgaste dental, mucho dolor y más sensibilidad.

· Caries
Y por si fuera poco, las caries también salen por estrés. Cuando la caries está muy avanzada, hay mucho dolor porque lo más seguro es que haya alcanzado el nervio o la dentina. El contacto con los alimentos muy calientes o muy fríos genera a la larga mucho dolor cuando hay caries en el diente. Y el dolor puede aumentar si no se atiende a tiempo.

En definitiva, los dientes se ven afectados por situaciones prolongadas de estrés y ansiedad. Por lo que hay que evitarlas o saberlas tratar con terapias realizadas por profesionales.

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